Las bulbosas son plantas sin raíces pero con bulbos que son los encargados de captar nutrientes para aportar energía a la planta. Son plantas que durante un período del año pierden sus partes vegetativas quedando tan sólo el bulbo bajo tierra. En este período los bulbos se pueden sacar y guardar en oscuridad para volver a plantarlos a mediados de invierno (en el caso de las bulbosas de primavera) ya que necesitan un período bajo tierra para captar esos nutrientes imprescindibles para su posterior desarrollo, así como un período de frío sin el que no se desarrollarían. Esta facilidad para poder sacarlos y cambiarlos de lugar cada año hace que sean unas plantas especialmente atractivas para todos aquellos que disfruten cambiando y rediseñando la estética del jardín. Además suelen dar flores muy vistosas cuyo único defecto es ser tan efímeras.
Se suelen dividir en función del período de floración en bulbos de primavera y bulbos de verano, estos últimos se plantan más tarde que los de primavera. Personalmente,prefiero las bulbosas de primavera pues comienzan su floración cuando todavía hay pocas flores y el jardín aún no se ha sacudido el aire invernal.
Una ventaja fundamental de estas plantas es que prácticamente no necesitan cuidados, no requieren riegos continuos ni podas y aunque absorben muchos nutrientes del suelo la mayoría pueden sobrevivir y desarrollarse en terrenos pobres y arenosos. Además se multiplican ellos mismos cada temporada de tal modo que cuando los sacamos en otoño podemos ver que casi todos los bulbos tienen adherido un bulbo más pequeño y fácilmente separable que tardará un par de temporadas en otorgar flores.
Entre las bulbosas de primavera podemos destacar los Lirios, Narcisos, Tulipanes, Jacintos, Muscaris, etc.
TIEMPO DE TULIPANES
Como ya hemos comentando otras veces, los tulipanes son muy fáciles de cuidar: no precisan más riego que el de las lluvias primaverales y no requieren abonar el suelo ni cavarlo, tan sólo deben pasar un período de frío. Como contrapartida, los tulipanes dan flores preciosas pero muy delicadas y efímeras. En cualquier caso contemplarlos es todo un placer.